Así como el buen músico detecta
cuando la orquesta se desafina en una sola nota, o el excelso pintor ve trazos
incoherentes con tan solo mirar una vez el cuadro, de esa misma manera la
persona que pretende dominar la escritura creativa debe encontrar las
desarmonías en sus propios escritos.
Eso se logra de una forma muy
sencilla: leyendo el texto en voz alta y, en el momento que se escuche algo
extraño detenerse. Con total seguridad encontraremos un error. Ya sea de
redacción, de armonía de las palabras, de contrariedad en la historia, de
deficiencias en el ritmo, o de cualquier detalle que antes no se había dejado
apreciar. Pero para que este ejercicio rinda sus máximos beneficios se tiene que
entrenar el oído para que esté lo más afinado posible.
A continuación te presento tres
formas de afinar el oído, que te ayudaran para ser mejor con la escritura creativa.
1.
La lectura en voz alta:
Habituarse a leer en voz alta es
la principal costumbre que desarrollará en nosotros un oído a prueba de errores.
Antes se deben tomar algunas precauciones. La primera de ellas es elegir qué leer. en la medida que se escojan grandes maestros del lenguaje, se tendrán
mejores resultados. Se debe tener especial cuidado con las traducciones; hay
unas muy buenas, pero otras que en definitiva no nos serán de mucha ayuda, ya
que maltratan el lenguaje y no queremos que nuestro oído se acostumbre a
escuchar errores.
De la larga lista de buenas
lecturas que podemos encontrar para leer en voz alta, es muy recomendable escoger
la poesía, no importa que lo que escribamos sea prosa. Este
género es la forma más depurada del lenguaje de cualquier cultura.
2.
Escuchar la lectura de otras
personas.
El estar atento a la lectura de
otras personas también es de vital ayuda para que nuestro oído sea más
receptivo. Puedes encontrar otros lectores en clubes de literatura, que por lo
general se reúnen en bibliotecas a compartir la pasión por las letras. Otra
excelente opción es You-tube. En la wed hay muchos videos de recital de poesía,
además de lecturas de cuentos y novelas.
Si se quiere llevar esta experiencia a otro nivel se pueden escuchar
autores en otros idiomas.
3.
Grava tu propia voz leyendo,
después de un tiempo escúchala.
Este último consejo, que es una
combinación de los dos de arriba, es mi
preferido. Porque sabes que es tu voz la que suena en el computador o en el
móvil, pero suena como la de un extraño.
Cualquiera de los tres ejercicios
que realicemos con regularidad harán maravillas por la calidad de nuestro oído
y los resultados se verán a la hora de corregir nuestros escritos.
Recuerda que para tener constancia debes hacer de estos ejercicios algo que te divierta y apasione.
Te agradezco por leer este
post.
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