Consejos para Principiantes de Escritura Creativa #1.
En el mismo momento que nos
planteamos adentrarnos en el peligroso mundo de la escritura creativa, nos
encontramos con una regla que de tanto escuchar parece como si fuera mandato de
un Dios omnipotente que está a la espera para castigarnos si en nuestra osadía
o torpeza incumpliéramos dicha regla. Me
refiero por supuesto a esa que dice que “Menos es Más”. Y como no creerla, si
la repite desde el más consagrado de los escritores hasta aquel que nunca en su
vida ha escrito un verso.
Aunque soy uno de los que más
venera esta regla, porque tiene sus fundamentos en argumentos sólidos, también
estoy convencido que cuando se empieza con los primeros escritos no se debería
de tener en cuenta este consejo. Al
principio de nuestra vida creativa lo más conveniente es seguir el flujo
natural que indica que Más es Más.
¿¿¿Por qué doy un consejo que parece ir en contra de principios ya establecidos???
En realidad no es ir en contra,
sólo estoy convencido por experiencia propia, que la mejor forma de torpedear
los primeros pasos en la escritura creativa es con la imposición de reglas
perfeccionistas, que impiden que nuestro cerebro y manos trabajen con fluidez
total. Cuando nos sentamos ante la hoja en blanco con el pensamiento que
tenemos que escribir palabras, oraciones y párrafos perfectos; el resultado no
es otro que el bloqueo o la creación de personajes y situaciones artificiosas.
Esto se debe a que al principio a
casi nadie le explicaron que la escritura creativa se divide en dos: en
Escritura y en Re-escritura, que son opuestas aunque complementarias. Y el
consejo de Menos es Más sólo se debe de tener en cuenta en Re-escritura.
De hecho, si nos ponemos un
poquito quisquillosos tenemos que decir que cualquier consejo sobre técnicas de
escritura se debería de evaluar desde el enfoque de la Re-escritura. En el
momento que nos sentamos a escribir no se debería de pensar en los cómo y los por qué, incluso la ortografía y
la redacción se pueden dejar para el proceso de re-escritura. Desde este punto
de vista, más siempre es más. Después con borrador en mano podemos hacer muchas
mejoras, pero por ahora eso no nos debe preocupar.
Otro motivo por el que al
principio deberíamos esforzarnos para que nuestros escritos sean muy abundantes
en palabras, es porque en el mediano y largo plazo la cantidad redundara en
calidad. Por supuesto que es una gran
virtud describir una escena o un personaje con pocas palabras, pero si en
nuestros primeros escritos utilizamos muchas palabras en realizar
descripciones, diálogos, explicaciones o escenas; tendremos más elementos para
saber en qué somos buenos y en qué no tanto.
Lo que hay que tener en cuenta es
que después, cuando el tiempo y la constancia nos den más conocimientos,
tendremos que sentarnos a re-escribir un montón de nuestras historias y versos
que aunque consideramos buenos están en la primera etapa.
En conclusión, en escritura menos
siempre es más, pero cuando somos nuevos en la guerra de combatir la hoja en
blanco, Más siempre será Más. Entre más palabras diarias escribamos más fluirá
nuestra imaginación, más verosímiles se harán nuestros personajes, y más
empatía ganarán nuestros textos.
Espero que este consejo haya sido
de utilidad.
Gracias por leer hasta el final.
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